- Los futuros de trigo en Chicago anotaron ganancias este jueves, luego de que la Organización Mundial del Comercio (OMC) informara que los envíos de trigo a través del Canal de Suez cayeron casi un 40% en la primera quincena de enero, a 0,5 Mt, debido a los ataques en el Mar Rojo y el golfo de Adén. Asimismo, se espera que las exportaciones marítimas ucranianas de grano caigan alrededor de un 20% en enero respecto al mes anterior debido a la crisis en el Mar Rojo y a las vacaciones de Año Nuevo. Mientras tanto, el embajador ucraniano en Turquía declaró que se están llevando a cabo «ciertas negociaciones» en relación con la iniciativa de exportación de grano mediada por la ONU que se cerró en el 2023.
- El maíz culminó con saldo dispar, aunque se mantuvo prácticamente estable entre jornadas. En este sentido, luego de caer a mínimos de tres años durante la rueda del jueves, los contratos del cereal repuntaron gracias a la cobertura de posiciones cortas y a las compras técnicas. La mejora de las perspectivas de las cosechas en Sudamérica y la estimación de una cosecha histórica de maíz estadounidense continúan presionando las cotizaciones.
- La soja finalizó en terreno mixto, con los contratos de corto plazo al alza y los de largo plazo a la baja. Las expectativas de un suministro mundial adecuado y la mejora del tiempo para la cosecha en Brasil, el principal exportador mundial de soja, siguieron pesando sobre los mercados. No obstante, todavía persiste cierte preocupación por la cosecha brasileña. La consultora Agroconsult rebajó este jueves su previsión para la cosecha de soja de Brasil a 153,8 Mt, desde los 161,6 Mt de noviembre. Un descenso de la producción de soja en Brasil sería necesario para compensar una esperada cosecha abundante en Argentina, según afirmaron ciertos analistas.
Financieros y de capitales
- El alivio que había traído la noticia de un acuerdo con el FMI en el frente cambiario fue efímero y se diluyó ante la renovada dolarización en busca de cobertura frente a una inflación que viaja a 25% y tasas reales negativas con un rendimiento de 9% mensual, lo que disparó al dólar blue a un récord de $1.225.
- Analistas vislumbran un escenario de tensión sobre los dólares libres y las reservas si no hay cambios en la política monetaria, e incluso advierten sobre el riesgo de una nueva devaluación antes de la llegada de la cosecha gruesa en abril, de no mediar estos cambios.
- La brecha cambiaria entre el dólar informal y el tipo de cambio oficial se ubicó en 49,64%, y en el caso del CCL quedó 55,5 %. Para los analistas, esta brecha alta hará más atractiva la licitación del BOPREAL -el bono para los importadores- que cierra este jueves, y un buen resultado podría ayudar a descomprimir la presión sobre la divisa financiera al absorber pesos del mercado.