El mercado inmobiliario rural se mueve en un aire de expectativas de cambio de rumbo. En marzo, la posibilidad de otro color político a partir de diciembre generó expectativas en el mercado que permanecen.
La Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR) publicó el índice de actividad de mayo con un aumento de 7,76 puntos. De esta manera, la cifra del mes fue de 32,88, lo que marcó un repunte respecto de abril.
En este punto, CAIR remarcó que los valores de la tierra siguen tentando a los inversores quienes apuestan a un cambio positivo en la economía. La mirada está puesta en diciembre.
Este ascenso de la actividad se da también en el marco de pesimismo por la una situación general del país. Los inversores miran a futuro. Por este motivo, la cautela es la protagonista de los negocios.
El mercado inmobiliario también registró un descenso en los arrendamientos agrícolas de Córdoba. Sin embargo, los valores se mantienen altos en retrospectiva.
La Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA) informó que la primera estimación de arrendamientos agrícolas en Córdoba arrojó un resultado de 11,5 quintales de soja por hectárea. Este valor promedio disminuyó medio quintal por debajo de la campaña anterior.
Por su parte, el índice de CAIR se compone de los resultados de la encuesta mensual de actividad efectuada entre socios de todo el país. Además, se analiza la cantidad de avisos publicitarios de campos en venta o alquiler en los principales medios de gráfica de tirada nacional, la cantidad de anunciantes en la web de CAIR y las operaciones rurales realizadas en el periodo analizado.
Al mismo tiempo, se contemplan las búsquedas y consultas efectuadas por inversores y la cantidad de avisos comerciales en las principales plazas del interior del país. De esta manera, la actividad inmobiliaria rural aumentó con las expectativas de un cambio de rumbo económico.