De acuerdo al último informe de la Guía Estratégica para el Agro, con la presencia de una tercera Niña hasta diciembre en los modelos internacionales y tras los malos resultados que dejó el cultivo en la reciente cosecha, «el clima” sería la respuesta esperable. Sin embargo, en las encuestas de esta semana, productores y asesores señalan la incertidumbre en las condiciones de mercado y los altos costos de implantación en primer lugar en el ranking de respuestas. Desde Bigand dicen” muchos productores no cuentan con suficiente circulante para concretar la alta inmovilización de capital que requiere la siembra maicera por la sequía. Estimamos 10% menos de superficie”.
“Hay incertidumbre de precios de venta por posibles cambios en las condiciones de comercialización y variación de precios internacionales. También, no conocer la disponibilidad y el precio de los fertilizantes y trabajar con altos costos de implantación respecto de la soja no ayuda a sumar área al maíz”, dicen en San Gregorio que estiman una menor área maicera. Desde Carlos Pellegrini dicen que la intención de maíz sería igual que hace un año. Pero advierten: “la fertilización se ha anticipado en un 50%. El resto que no compró no va a aplicar para altos rindes. Los resultados no serán los mismos”.
En Corral de Bustos coinciden; estiman una superficie similar, impulsada por la baja en el precio de los fertilizantes . Pero tiene que llover: “ya falta poco para septiembre y necesitamos 200 mm en el perfil del suelo”. Agregan: “la financiación ahora es en dólares, en pesos se cortó. O canje”. Hacia el suroeste, desde La Carlota no están tan seguros de cuanto sembrar aún. Recién a mediados de agosto lo definirán: “con los desbarajustes de precios de los últimos días es difícil saberlo. Esta campaña las decisiones se van a tomar muy, pero muy, sobre la hora”.