El futuro inmediato será de menos sorgo y más maíces tardíos

El interés por cultivar sorgo decae en Entre Ríos, al punto que desde la Bolsa de Cereales reportan una implantación del 70% de la intención manifestada por productores antes del inicio de la campaña, de unas 102.000 hectáreas.

Sostienen que el escenario es complejo. debido a la sequía que se instaló desde mediados de noviembre y que imposibilitó el normal desarrollo de las labores. Como sea, los primeros lotes recorren la etapa de macollaje con una buena condición; pero la seca generó un atraso de la fecha en la siembra de soja y maíz de fechas tardías, por lo tanto, se desató un cuello de botella donde en muchos casos se optará por continuar con la siembra de los otros cultivos. En consecuencia, en este contexto, es lógico pensar que el área destinada finalmente experimente una caída mayor a la inicial.

Por otro lado, en la Bolsa prevén que el área destinada a la siembra del maíz de segunda y tardío en el ciclo 2022/23 se posicionaría alrededor de 70.000 hectáreas, cuando en el ciclo pasado llegó a 47.800; lo que da una expansión de 22.200 hectáreas.

Para la entidad los agricultores eligen siembras en fechas tardías para amortiguar el impacto de “La Niña”, ya que los modelos indicaban una alta probabilidad de déficit hídricos para el mes de diciembre, momento donde ocurre la floración de los maíces de primera.

En consecuencia, avisan que se concretó apenas el 23% de la intención planificada y en algunos casos, se han sembrados lotes en seco, sin humedad en la cama de siembra a la espera de precipitaciones.