La gran novedad de esta semana vino por parte de la reanudación de las exportaciones ucranianas, con el primer barco cargado con grano partiendo desde el puerto de Odesa, en el Mar Negro, lo que posibilitaría la reactivación del comercio internacional del país sumido en la contienda bélica. En este contexto, es interesante analizar cómo se proyecta la producción y las exportaciones ucranianas para la campaña 2022/23, la cual es la más baja en casi una década. Solamente respecto del ciclo anterior, la producción triguera de Ucrania disminuyó un 40%. La nueva fase de apertura, si bien está iniciando y aún hay ciertas reservas acerca de la efectiva movilización de todos los barcos bloqueados hace meses, es claro que se movilizarán las ventas externas de país, proyectadas en 10 Mt.
Según datos del USDA, las previsiones para la producción de trigo ucraniano se ubican por debajo de las 20 Mt para el ciclo comercial 2022/23, iniciado en julio de este año. Estas previsiones a la baja ya eran considerables, teniendo en cuenta los más de 30 Mt de la campaña 2021/22.
Los precios del cereal a nivel local e internacional
A nivel internacional, desde el comienzo del bloqueo a los puertos del Mar Negro el precio del cereal fluctuó en más del doble de los mostrados a inicios del año. En junio, momento en el cual diversos organismos internacionales como la ONU y otros países de la región comenzaron a operar en la planificación de una vía segura de exportación de los granos ucranianos, los precios comenzaron a descender de los valores récords y mostraron una tendencia bajista.
Esta primera semana de agosto posiciona al trigo en Chicago con bajas de casi US$/t 15 las tres primeras jornadas, y espera cerrar la semana en torno a los US$/t 287. De esta manera, el trigo cae más de un 10 % desde julio, y más de un 47% desde el máximo registrado en marzo del corriente año. Sin embargo, el jueves el cereal experimentó subas por un mayor dinamismo en la demanda, y a la espera de que la reanudación de exportaciones ucranianas se realice según lo pactado.
«En lo referido a la operatoria en la plaza doméstica, el mercado de trigo experimentó un acotado volumen comercial en líneas generales, de la mano de un número reducido de participantes y con precios que tendieron a la baja en el transcurso de la semana», afirmó el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario. Y agregó: «Si bien se registraron ofertas por la mercadería correspondiente a la campaña 2022/23, el sector exportador se mantuvo concentrado en las entregas cortas. En este sentido, los ofrecimientos por parte de la demanda se ubicaron en torno a US$ 280/t para la entrega inmediata y contractual de mercadería el miércoles».
Sin embargo, el jueves rebotaron las cotizaciones y mostraron un alza nuevamente, de hasta casi US$/t 8, debido a que las recientes caídas de precios llevaron a la demanda a recuperarse, influenciada en parte por la debilidad exhibida en el dólar.
De cara a la nueva campaña local, está finalizando la siembra de trigo nuevo
En este contexto de precios, la siembra total del trigo nuevo de Argentina al 4 de agosto totaliza las 6,08 Mt y representa el 98%; en contraposición al 99,7% mostrado a igual fecha en el ciclo anterior. Estos valores posicionan a la siembra 2022/23 por debajo tanto de la campaña anterior como del promedio de las últimas cinco campañas.
El clima es el factor determinante de estas diferencias, ya que se vienen manifestando déficits hídricos en áreas clave. Este es el caso respecto de la provincia de Buenos Aires, en donde el 96% de la siembra está terminada, en comparación al 99% del año anterior, Las lluvias acumuladas la semana pasada en la delegación Tandil se encuentran en valores entre 60 y 100 mm, por lo que el perfil del suelo cuenta con una disponibilidad óptima de agua para los cultivos y en zonas bajas con algunos excesos. Restan sembrarse algunos lotes de trigo que habían quedado por falta de humedad en el suelo o bien por la rotación con papa que aún se está cosechando. Seguramente la semana próxima se completarán los lotes faltantes con ciclos cortos. A su vez, tanto Santa Fe como Córdoba, presentaron escasez de precipitaciones necesarias, lo que afectó la situación del cultivo, no pudiéndose avanzar con el resto de la siembra.
Un dato interesante se desprende del informe semanal de GEA (Guía Estratégica para el Agro), que indica que el 35% del trigo se encuentra en condiciones entre regular y malo. Si bien más de la mitad de los cuadros (60%) aún se conservan en buen estado y un 5% muy buenos, las lluvias aun no llegan y con el transcurso de los días los requerimientos del cultivo se incrementan. Hay un 2% de los cuadros que ya ingresaron en encañazón y el resto se reparte entre pleno macollaje (60%) e inicios de macollaje (38%). Hay lotes en los que comienzan a detectarse signos de estrés hídrico.
La molienda de trigo pan continúa a buen ritmo
Por su parte, la molienda de trigo pan parece continuar con el ritmo alcista mostrado desde comienzos del año. De esta manera, si bien los valores del primer semestre se mantiene prácticamente al mismo nivel que la campaña pasada, superándola por 200 toneladas, se mantiene con pocas diferencias respecto del último año comercial. En junio de 2022 se molieron cerca de 512.892 toneladas, por encima de las 512.669 toneladas del mismo mes del año pasado, aunque cerca y recortando diferencias para el acumulado total de la campaña.
Respecto del trigo candeal, en el mes de junio de 2022 se molieron aproximadamente 3.000 toneadas menos que en el mes de mayo, pero respecto del año anterior se observa un crecimiento interanual del 21%.