Los granos que mira el Gobierno: la mayoría irán a cubrir costos y gran parte del resto a inversión de la siembra

En el campo generó un fuerte malestar que se apunte nuevamente a la venta de la cosecha, con medidas que intentan forzar la decisión de productores.

En primer lugar, esto tiene que ver con que el sector fue practicamente el único que ingresó divisas en 2019. Si bien de cada US$ 10 que ingresaron a la Argentina US$ 6,3 fueron de exportaciones de productos del agro, lo que sucede es que es uno de los únicos cuyo balance es positivo en cuanto a ventas al exterior e importaciones.

El consultor en economía y negocios internacionales Marcelo Elizondo destacó que el sector generó un superavit de US$ 37.535 millones en 2019.

Respecto a la venta de productores, la Sociedad Rural analizó que las ventas tienen un adelanto de 12 puntos porcentuales contra mismo momento de la campaña anterior (se vendió un 44 % de la soja y un 48 % del maíz). Cabe señalar además que aún resta cosechar un 64 % del maíz y un 17 % de la soja.

Del trigo que se cosechó en la campaña 2019/20 ya se vendió casi la totalidad (95 %) y comenzó a ganar ritmo la comercialización de la nueva campaña, para la que se espera más del doble de superficie que se implantó hace 8 años.

Según Daniel Pelegrina, presidente de SRA, la reciente medida «tiene implícita la suposición de que los productores están reteniendo granos». «Es una suposición que carece de fundamentos».

La Austral analizó recientemente la expectativa de venta en una encuesta con productores: «Cuando son consultados respecto a la necesidad de ventas que tienen para cubrir compromisos antes de julio, casi 70% de los productores indica que deberá vender más de la mitad de su producción. Incluso casi un 30% de los productores indica que deberá vender 80% o más de su producción granaria».

En total, un 28% de los productores indican que deberán vender más del 80% de su producción de granos antes de julio, a fin de cubrir sus compromisos de cosecha. Un 32% de los productores plantea que necesitará vender menos de la mitad, en tanto 40% venderá entre 50% y 80% de lo producido.

La consulta en cuestión fue: ¿A fin de cubrir los compromisos de la campaña 2019/2020, que porcentaje de su producción de granos necesita vender antes de Julio incluyendo gastos de cosecha?

El ingeniero agrónomo Néstor Roulet explicó también que el patrón de venta de la producción es muy similar en todos los años: un 50 % entre abril y junio para pagar los gastos directos y gastos de insumos de la actual campaña y un 20 % entre julio y agosto que generalmente se destina al pago de alquileres.

Por otro lado, un 20 % se comercializa habitualmente entre septiembre y diciembre para afrontar los gastos directos de implantación de la nueva campaña y deja un 10 % para futuros gastos.

La Austral también consultó sobre el excedente una vez cubiertos los gastos de la campaña 2019/20: más de la mitad de los productores (56%) se muestra inclinado a la compra de insumos, mientras que 30% plantea que va a almacenar sin precio fijo, a la espera de mejores precios.

«Es marginal la franja de quienes piensan en hacer inversiones físicas (maquinaria o capital fijo) o financieras (fijar precio con futuro o compraventa de dólares)», se desprende del relevamiento.

«Nos encontramos nuevamente con normativas que diseñadas sobre una planilla de Excel, no tienen en cuenta las características propias, las dinámicas productivas y de integración de cadena del principal aportante de divisas de exportación», destacó Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas, sobre el intento de forzar la venta de la cosecha.

Fuente: Agrofy News